¿Tu hijo está en la adolescencia? Descubre algunas técnicas para ayudar a prevenir el consumo de drogas
El consumo de drogas y la capacidad de postergación
“…así que uno planta su propio jardín y decora su propia alma, en lugar de esperar a que alguien le traiga flores…” Jorge Luis Borges
Con mucha frecuencia se escuchan en los consultorios de psicólogos y psiquiatras que tratan el tema de la farmacodependencia, exclamaciones de desconcierto respecto del porqué un familiar consume substancias, o respecto de qué hacer con el consumidor, preguntas tanto sensatas como difíciles de responder. Sin embargo, jugando un poco con el tiempo y las posibilidades, hoy quiero abordar un tema relacionado con algo que podríamos hacer con los jóvenes que aún no son consumidores, para aumentar un poco la probabilidad de que estos jóvenes puedan hacer buenas opciones para sus estilos de vida.
Dentro de los múltiples factores de riesgo para la farmacodependencia se ha identificado uno que se llama Descuento por Demora (DD), que en pocas palabras hace referencia a la pérdida del valor que se le da a las cosas entre más tiempo se requiera para obtenerlas, por ejemplo: personas con alto DD van a preferir poco dinero ahora y no bastante dinero después. Pero, y el lector fácilmente se preguntará ¿qué tiene que ver esto con el consumo de sustancias psicoactivas ilegales?, y la respuesta es que cuando un joven decide, ¡sí, decide!, consumir sustancias psicoactivas (SPA) es muy probable que esté dándole mucho valor a los beneficios a corto plazo del consumo y dándole muy poco valor a los beneficios de no consumir a largo plazo.
Ahora bien ¿cuáles son los beneficios a corto plazo del consumo? bueno, son múltiples y dependen de particularidades individuales y del contexto, como por ejemplo: la aceptación social de algún grupo, pasando por la disminución de la sensación de malestar en caso de hambre o frío si es el caso, hasta uno de los más claros como es, dentro del nivel biológico, la sensación de placer por la activación de circuitos dopaminérgicos que se activan en el cerebro siempre que hacemos algo relacionado con nuestra supervivencia o reproducción como comer cuando tenemos hambre o tener sexo. Y que son los mismos circuitos que se activan cuando se usan drogas psicoactivas.
Los bajos niveles de DD permiten mayor capacidad de postergación de la gratificación y los altos niveles de DD van a hacer que la persona tenga mayor dificultad para escoger opciones que impliquen esperar.
De hecho, en los tratamientos para la farmacodependencia basados en el control de contingencias se ha evidenciado que los jóvenes con bajo DD tienen mejores resultados que los que tienen alto DD (Stanger, Budney, & Bickel, 2013); tanto es así que de hecho se ha considerado como un buen indicador para saber en qué etapa del tratamiento para la farmacodependencia podrían ser ubicados al momento de su ingreso, y como una guía para graduar los tiempos de espera que deben tener las consecuencias de sus acciones dentro del tratamiento (Stanger et al., 2013).
Entonces ¿qué hacer para disminuir el Descuento por Demora en nuestros jóvenes y lograr así incrementar un poco la probabilidad de que hagan opciones que contemplen los beneficios futuros?
Hay tres procedimientos específicos que podrían servir para aumentar la capacidad de postergación al disminuir el Descuento por Demora, uno de ellos es el entrenamiento en memoria de trabajo (Bickel, Yi, Landes, Hill, & Baxter, 2011), que es el tipo de memoria que se utiliza para realizar las tareas inmediatas pero que no van a generar huellas memorísticas a largo plazo, por ejemplo recordar un número de teléfono mientras lo marcamos para luego, algunos minutos después ya no recordarlo. Esto, ya que se ha encontrado una relación entre recordar el pasado e imaginar el futuro, cuando hay daños en el hipocampo.
Otro procedimiento es el de promover que los “Ceros” queden de relieve, en la ecuación: “Algo ahora pero nada después” y “Nada ahora pero más después” (Radu, Yi, Bickel, Gross, & McClure, 2011), y el fantasear con imágenes detalladas de los momentos en que se recibirá la gratificación en el futuro (Peters & Buchel, 2010) también podría disminuir la pérdida de valor de la gratificación por el paso del tiempo (DD). Estas estrategias serán revisadas con mayor detalle en próximos artículos.
Según lo que refieren Stanger y colegas (Stanger et al., 2013) basándose en los estudios de Steinberg y colegas (Steinberg et al., 2009), el mejor momento para realizar estos ejercicios sería entre los 14 y 16 años de edad, ya que en esta edad pareciera ser el pico de los cambios en el Descuento por Demora, convirtiendo este periodo de tiempo en único y particularmente susceptible de mejorías en la capacidad de postergación, y en la posibilidad de darle preferencia a las gratificaciones mayores aun cuando haya que esperar para conseguirlas.
Todas estas reflexiones y descubrimientos hechos por estos investigadores, nos sugieren, entre otras cosas, que renovar viejas costumbres como las de hablar acerca de nuestros sueños con nuestros hijos, promoviendo de esta manera que ellos hablen de los suyos, fantaseando con vívidos detalles respecto del día cuando se consigan los objetivos planeados, o jugar juegos que impliquen memorizar cosas de nuestro alrededor, van a aumentar las probabilidades de que ellos logren tomar mejores decisiones cuando tengan que hacerlo, tomando en cuenta aquellos frutos lejanos en el tiempo, que, como siempre, son los beneficios de la abstinencia o de la moderación.
De una u otra manera, en la interacción diaria hay que recordar entonces, que el hecho de que nuestros hijos tengan que esperar un poco por lo que quieren, no les va a hacer daño, y esto en gran parte depende de nosotros, los adultos que los criamos.
Referencias:
Bickel, W. K., Yi, R., Landes, R. D., Hill, P. F., & Baxter, C. (2011). Remember the future: working memory training decreases delay discounting among stimulant addicts. Biol Psychiatry, 69(3), 260-265. doi:10.1016/j.biopsych.2010.08.017
Peters, J., & Buchel, C. (2010). Episodic future thinking reduces reward delay discounting through an enhancement of prefrontal-mediotemporal interactions. Neuron, 66(1), 138-148. doi:10.1016/j.neuron.2010.03.026
Radu, P. T., Yi, R., Bickel, W. K., Gross, J. J., & McClure, S. M. (2011). A mechanism for reducing delay discounting by altering temporal attention. J Exp Anal Behav, 96(3), 363-385. doi:10.1901/jeab.2011.96-363
Stanger, C., Budney, A. J., & Bickel, W. K. (2013). A developmental perspective on neuroeconomic mechanisms of contingency management. Psychol Addict Behav, 27(2), 403-415. doi:10.1037/a0028748
Steinberg, L., Graham, S., O’Brien, L., Woolard, J., Cauffman, E., & Banich, M. (2009). Age differences in future orientation and delay discounting. Child Dev, 80(1), 28-44. doi:10.1111/j.1467-8624.2008.01244.x