Redacción Editorial Phrònesis.
Tal vez te ha pasado, te esforzaste por hacer la rutina de ejercicios toda la semana, llevas sin misericordia el conteo de las calorías que consumes a diario, pero al compartir el fin de semana con tus amigos no lo pudiste resistir… comiste en exceso de esa deliciosa tarta de chocolate.
¿Es algo de qué preocuparse?
Cada uno de nosotros podemos cometer un desliz en nuestro régimen de alimentación, lo que importa es que tomes conciencia de realizar los correctivos a tiempo.
Recuerda que perder tiempo preocupándote no es lo indicado. Mientras más preocupada estés, será más simple que los nervios te puedan traicionar y harán de un error algo que lamentar por mayor tiempo. Esto puede hacer que un desliz se convierta en un desorden alimenticio como el comer por ansiedad, lo que evidentemente es peor.
Azmina Govindji, dietista y portavoz de la Asociación Dietista Británica, afirma que la clave para adelgazar estaba en pensar el largo plazo. De esta forma, en lugar de preocuparte si te sales una vez de la dieta, verifica como ese error se manifestó en tu peso o medidas: si no tuvo ningún efecto, excelente; si lo tuvo, continúa con tu régimen.
Debes ser honesto contigo y no lo hagas como un castigo, puedes tomar la situación como un reto, Si es necesario aumentar tu rutina de ejercicios, o consumir menos calorías, pues ocúpate en hacerlo, no ganas nada con preocuparte.
Para reforzar lo anterior, el Profesor David Haslam, expositor del Foro Nacional de la Obesidad, explicó esto con claridad al afirmar que “Tenemos suficiente reserva metabólica para corregir un error fácilmente con mayor actividad física”, por lo que depende de ti enmendar el error.
Ten siempre un Plan B
Recuerda que lo que importa no es caer sino levantarse. Por tal motivo, debes tener en mente un plan de contingencia cuando por cualquier circunstancia te salgas de tu rutina de alimentación o abandones tu régimen de ejercicios.
Es importante llevar un registro de tu actividad, de tus logros y de tus caídas. Sé honesto, sin hacer de tu error una tragedia, para que puedas llevar a cabo las acciones necesarias para corregir el problema.
Recuerda trazarte un plan de trabajo y seguirlo lo mejor que puedas. Sin embargo, cuenta con posibles rutinas alternas para corregir el desliz. Puede ser que pases más tiempo corriendo o en la bicicleta.
Un paso a la vez
Se dice que cada carrera comienza con el primer paso que das y tus éxitos y errores en tu régimen de adelgazamiento no son más que eso, momentos. Lleva un registro de tus logros y caídas, con el objetivo de que puedas entonces verificar las consecuencias de cada salida del régimen alimenticio.
Cuando analices tu error dentro de un periodo mayor, como por ejemplo de un mes, comprenderás que fue tan solo eso: un error, pero que este no te apartó de tu meta personal de mantenerte en buena forma física o de adelgazar.
Por: Editorial Phrònesis
Para: elartedesabervivir.com