Comencemos por preguntarnos ¿Qué significa salir del clóset? Lo más seguro es que directa o indirectamente habrás conocido algún caso de una pareja donde alguno de los dos termino por dar a conocer su homosexualidad. Salir del clóset, por lo tanto, significa que se asume abiertamente la verdadera inclinación sexual que se ha tenido en secreto. Sin embargo, esta acción acarrea consecuencias tanto personales como familiares. Sobre todo, si se ha vivido en matrimonio y se tienen hijos. ¡Aquí te lo contamos todo!
Una verdad que sale a la luz
Cada vez es más común que tras años de convivencia, él o ella terminan por salir del clóset. Es cierto que, desde el punto de vista sociológico sigue llamando mucho la atención. A pesar de que, los momentos que se viven actualmente dan cabida para todo. La homosexualidad, en muchos casos, sigue siendo un tabú y salir del armario no debe tomarse a la ligera.
Algunos se preguntan si estas personas sufren de algún cambio en sus orientaciones sexuales a lo largo del tiempo. Otras llegan a pensar que siempre fueron homosexuales, pero que nunca se atrevieron a darlo a conocer. Hasta ahora, sólo existen dos explicaciones para el hecho de salir del clóset. Una de ellas sería la falta de definición en la orientación sexual. Muchas personas, pueden estar deliberando una sexualidad ambigua, marcando un rango entre lo homosexual, lo heterosexual o la bisexualidad. Recayendo, muchas veces, en la omisión de la inclinación. Al pasar del tiempo la persona va focalizando en que zona del espectro sexual se encuentra.
La otra explicación sería que a pesar de tener claro su orientación sexual. Los condicionantes sociales todavía siguen pesando más por lo que obliga a estas personas ocultar su homosexualidad o verdadera inclinación, por ende les cuesta o evitan salir del clóset.
Un hecho que hace historia
La homosexualidad dentro de un matrimonio ha existido desde siempre. En la historia podemos ver como muchos reyes o gobernantes eran homosexuales, pero aún así debían casarse para garantizar una descendencia. Esto, con la finalidad de perpetuarse en el poder. Por lo tanto, era más que obligatorio mantener un matrimonio. Aunque sus gustos fueran homosexuales no terminaban por salir del clóset. Por lo tanto, no era de extrañar que fuera del matrimonio y paralelamente a este se mantuviera una actividad homosexual sin muchas complicaciones. Siempre y cuando no obstruyera el primer fin.
Casos como los de Alejandro Magno o Julio César son un ejemplo de ello. En el siglo XII se resaltó mucho la relación del Rey Ricardo Corazón de León con el Rey Felipe Augusto de Francia. Para el siglo XVII Jacobo I de Escocia, tuvo hasta más de cuatro amantes varones. En el caso de España, para el siglo XV en Castilla. Tanto el Rey Juan II como su hijo Enrique IV, tuvieron amantes por no decir parejas tan estables como su matrimonio heterosexual. Sin embargo, nunca ninguno de estos personajes termino por salir del clóset y hablar abiertamente sobre sus preferencias sexuales.
Razones por las que resulta difícil salir del clóset para muchos
La homosexualidad ha pasado por diferentes etapas. Existen datos del antiguo Egipto y la antigua Grecia, en el que la homosexualidad no era considerada como algo mejor o peor que la heterosexualidad. Es a raíz de la cultura judeo-cristiana y mahometana cuando ésta llega a considerarse un comportamiento delictivo. Hoy en día, hay más de 80 países donde todavía consideran la homosexualidad un acto ilegal. 5 de ellos de acuerdo con sus leyes puede condenar a la persona a pena de muerte.
Por lo que, en algunas culturas y sociedades salir del clóset no es tan fácil. De allí que, la verdadera orientación sexual quede oculta bajo la fachada de una familia normal y heterosexual. En el siglo XIX, la homosexualidad era considerada una enfermedad. Bajo este supuesto muchos tratamientos fueron impuestos. Con el fin de obtener una reorientación sexual eficiente. Entre los métodos más usados estaban la castración, vasectomía, histerectomía, ablación del clítoris, entre otros.
¿Qué pasará con mis hijos si salgo del closet?
Desde 1973 la homosexualidad está considerada una inclinación sexual. Por lo tanto, desde ese momento en los países desarrollados o en vías de desarrollo se ha aceptado y respetado dicha inclinación. En el caso de que se produzca una separación o divorcio por causas imputadas a salir del clóset lo mejor es buscar ayuda. Más aún si hay la existencia de hijos. Por lo que, con un buen terapeuta sexual se podrá trabajar y lograr grandes avances a nivel personal y familiar. Para ello, la familia en general tiene que enfocarse en la felicidad de la persona. Y que, la misma se sienta a gusto con lo que hace y lo que representa ser homosexual.
No obstante, el salir del clóset puede llegar a ser dramático cuando hay hijos de por medio. Es por ello que, muchos especialistas implementan sesiones de entendimiento familiar para que haya aceptación. Sobre todo, para que no ocurra una distancia pronunciada entre el hijo y el padre o madre en cuestión. El objetivo es hacerle entender al niño, adolescente, joven o adulto que nada va a cambiar con el hecho de que su padre o madre guste de alguien del mismo sexo.
La familia debe comprometerse a aceptar la decisión de los padres. Apreciarlos como seres humanos que son y no caer en el prejuicio. El terapeuta debe centrarse en fortalecer esos lazos de unión para que el apoyo nunca se pierda. Manteniendo, siempre, los sentimientos de unión familiar y la relación sana, feliz y amorosa de los padres con sus hijos. Salir del clóset, entonces, puede ser la oportunidad perfecta de pasar de la familia obligada a la familia escogida que todos desean.