fbpx
Inicio ColumnasNeuromanagement aplicativo-El cerebro inteligente Neuromanagement-aplicativo: aspectos empresariales

Neuromanagement-aplicativo: aspectos empresariales

Por Dr. Rodrigo Isaza Bermúdez
Neuromanagement-aplicativo. Aspectos empresariales

Desde hace muchos años, el conocimiento de las neurociencias ha llevado a la economía y al desarrollo empresarial a un punto de quiebre. Donde se hace necesario conocer la funcionalidad cerebral aplicada no solo a la vida diaria sino también a cada uno de los escenarios donde el desempeño es un valor agregado.

Un contexto que he aplicado al liderazgo es lo que yo acuñé como “El síndrome del Flautista de Hamelin”, tomando como referencia del famoso cuento de los hermanos Grimm. Pues al líder se le encomienda una misión, y todo el mundo espera que, con la aplicación del conocimiento, resuelva los problemas. Su poder llega a tal punto que, con la misma flauta y con el mismo encanto, se lleva también las riquezas lejos de la empresa perjudicando a todo el mundo.

Cuando el liderazgo es ciego, aceptamos los errores del líder como si fueran cualidades, llevando al grupo a perdonarle todos los errores. Con la música de su flauta, se lleva los valores por el despeñadero. Los factores emocionales no permiten evaluar la realidad y el conocimiento que pueden aportar los seguidores.

Neuromanagement-aplicativo. Aspectos empresariales

La relación entre la neurología y los negocios siempre ha sido un tema de estudio importante. Estas son las características más relevantes y sus alcances.

Dos premios Nobel de economía: Kahneman y Thaler dieron pautas para comprender que el desarrollo económico y los procesos cognitivos: memoria, atención, toma de decisiones, búsqueda y premio; iban de la mano de una serie de funciones cerebrales, en las cuales el afecto-sistema límbico influía en cada una de las actividades de las personas comprometidas con el desarrollo empresarial y la economía.

Inclusive, dándole un valor al conocimiento de los factores que modificaban la toma de decisiones para obtener un beneficio, limitando el conocimiento real de un tema cuando se comprometían los sentimientos y percepciones de nuestro cerebro afectivo.

¿Cómo cambiamos de opinión y seleccionamos las opciones cuando está en juego el conocimiento académico y nuestra experiencia en función de lo que pensamos o tenemos de memoria afectiva?

Según Kahneman, suponer que el conocimiento que poseemos sobre un tema específico, un aprendizaje o una experiencia previa; tener la solidez contundente para definir un asunto rutinario en cualquier profesión; mostrar la labilidad y la facilidad con la cual cometemos un error de desempeño, a causa de: factores emocionales, suposiciones mentales y criterios afectivos; modifican ostensiblemente lo que creemos con certeza es una decisión inteligente.

El cerebro modifica las verdades a conveniencia, de modo que, facilita una verdad mas accesible a nosotros. Muchas veces la toma de decisiones, y en gran parte del día laboral, están sujetas a lo que creemos más que a lo que sabemos.

¿Y cómo puede el neuromanagement influir en lo que pensamos o definimos?

La primera premisa es aceptar que tenemos un cerebro afectivo, entenderlo cómo funciona y hacer consciente las señales que nos envía mediante mensajes inconscientes de nuestro sistema servioso autónomo (SNA). El SNA permite percibir y detectar cambios sutiles en la piel, la mirada, la pupila, el tono postural, los cambios involuntarios de la cabeza y del lenguaje corporal, la inflexión de la palabra, la utilización de esquemas mentales en una conversación o en una entrevista, que pueden generar un mapa conceptual adecuado para definir una actitud o un desempeño empresarial.

La segunda premisa es saber que el conocimiento adquirido y la experiencia están bajo el vaivén de nuestros afectos y que podemos fallar si no tenemos la habilidad. Entendida ésta como la condensación de un aprendizaje previo y probado, que amerita flexibilidad y adaptación para cada escenario en el cual vamos a aplicar lo que sabemos.

¿Qué me garantiza el éxito empresarial?

Las empresas no son grupos, ni siquiera equipos, tienen que ser organismos como lo sostiene Peter Senge, en su libro “La quinta disciplina”. Si cada una de las secciones de la empresa no actúan como órganos vivos, que se alimentan, se conectan, se modifican y progresan individualmente en función de los demás, lo que se obtiene es un monstruo a semejanza de un tumor. Es gigante pero informe, voluminoso, hostil y destructivo.

El ego del empresario tiene que despojarse del orgullo, considerar el liderazgo como parte del conocimiento colectivo, estar por encima de prejuicios más allá del conocimiento estándar de los colaboradores, ir adelante. Esto imprime seguridad, afecto y tener la suficiente plasticidad cerebral para cambiar de rumbo en caso necesario. Recordar que el éxito cuando se cambia de sentido no es acogernos a un plan B, sino a otro plan A, que es igual de exitoso como el que planeamos inicialmente.

¿Qué beneficios puedo obtener si utilizo el neuromanagement-aplicativo en mi empresa?

  • Lo primero que se obtiene es conocimiento diversificado en la pirámide empresarial. Esto conlleva a manejar un mismo lenguaje comprensible para todos, una posibilidad de intercambio de habilidades y de fenómenos conscientes, extraídos de la parte inconsciente de cada uno de los miembros y colaboradores.
  • Fortalecer los liderazgos naturales de los colaboradores, establecer nexos de nuevos liderazgos mediante la aplicabilidad del razonamiento lógico y afectivo, generando toma de decisiones inteligentes, con un compromiso organizacional basado en servicio y mutuo beneficio.
  • Implementar el pensamiento colectivo que transmite el líder, lo que permite la adopción del conocimiento por parte de los colaboradores como si fuera propio, sin generar resistencia.
  • Aumentar la resiliencia y disminuir la procrastinación, que ralentiza el desarrollo empresarial.

Algunos consejos para el liderazgo y aplicación del neuromanagement – aplicativo empresarial

  • Recuerda que el conocimiento es la base del cualquier proceso a implementar.
  • El ambiente empresarial es un ambiente de personas con miedos, ansiedades, angustias y con procesos mentales individuales que se vuelven colectivos si se movilizan conductas directivas equivocadas.
  • El líder natural, flexibiliza el mando, lo hace accesible y consciente, de modo que las políticas de direccionamiento deben ir de la mano de la aceptación del proceso.
  • Recuerda que el afecto y las emociones tergiversan el conocimiento y la toma de decisiones.
  • El desempeño no es una función a implementar, es un proceso de aceptación de cargo, actividad y conocimiento, en el cual se imprime la personalidad individual y la marca de liderazgo empresarial.

Por. Rodrigo Isaza Bermúdez. Neurólogo clínico.

Bibliografía

  • Pensar rápido pensar despacio. Daniel Kahneman. Debolsillo (Edicion en español). Debate Ed. 2015.
  • Misbehaving: the making of behavioral economics. Richard Thaler. Ww. Norton Ed. New York. 2015.
  • La quinta disciplina. Peter Senge. Granica.Ed. 2.011.

Related Articles

Deja un comentario