Hipnótico es una película de Netflix que nos invita a plantearnos un par de interrogantes. Iniciemos por saber cómo la definirían, ¿interesante, atrapadora, irreal, emocionante, empática? Tal vez, todas porque de alguna manera nos sentimos identificados con uno de los personajes o quizás como un espectador externo que solo siente curiosidad por saber qué pasará, que se va envolviendo en una historia a la que ya le tiene un final o yendo más allá, como a un expectante al que le gustaría probar la hipnosis, saber de qué se trata o cómo se siente, pero con un poco de temor por el hecho de ceder el control total de sí mismo a otra persona. Y esto nos lleva a una pregunta un poco más interesante: ¿le has cedido el control de tu vida a alguien?
Los efectos de las emociones
Se realizó un estudio sobre el Trabajo Emocional, en el cual, Fisher y Ashkanasy (2000), se menciona que “suprimir emociones negativas es diferente a manifestar emociones positivas no sentidas”, pero ambas tienen un efecto directo en nuestras acciones (Gracia at el., 2004). Por ejemplo, el contener emociones incrementa la activación cardiovascular, produce estrés, alienación (perdida de la personalidad o identidad), desmotivación, falta de interés por trabajar o relacionarse con otros, etc.
Mientras que si, dejamos florecer nuestras emociones o expresamos de una manera adecuada y asertiva lo que sentimos, nuestro cuerpo realmente lo va a agradecer, se verán resultados como aumento en la autoestima, interés genuino por querer hacer lo que nos gusta, la sensación de disfrutar estar con el otro, confianza, empoderamiento, etc.
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Ventajas y desventajas de la hipnosis
La hipnosis no es sinónimo de inconsciencia total, o falta absoluta de voluntad, por el contrario, el paciente siempre mantiene un punto de contacto con la realidad (Vargas, 2005). Esta es utilizada como técnica coadyuvante para algunos terapeutas, quienes mencionan que ha sido útil a lo largo de la historia para controlar tanto síntomas físicos como psicológicos, demostrando ser un medio eficaz para mejorar la calidad de vida de muchos pacientes. Su uso se ha visto reflejado en el control de la ansiedad, disminución de tensión y regulación emocional; en la educación se ha empleado para mejorar el rendimiento escolar, la memoria, comprensión y estimulación de capacidades creativas. (Cabrera et al., 2013)
Sin embargo, es importante que este proceso lo realice un experto, que sepa manejar la técnica de manera profesional para evitar efectos negativos en los pacientes como una falsa sugestión que lleva a crear recuerdos que no existieron y generar emociones que posteriormente se pueden convertir en otra situación difícil de manejar. (Capafons & Mazzoni, 2004)
Hipnótico no solo nos muestra el poder que le podemos entregar a otros como proceso terapéutico, sino que realmente el poder lo tenemos nosotros; las decisiones que tomamos determinan si el poder de nuestra vida lo cedemos a otras personas, situaciones o emociones o si es nuestro, asumiendo las consecuencias, con la satisfacción de ser nuestros propios dueños.
Referencias
Cabrera M., Yolanda; López G., Ernesto; Ramos R., Yamila; González B., Mónica; Valladares G., Anais; López A., Laura. (2013) La hipnosis: una técnica al servicio de la Psicología. MediSur, vol. 11, núm. 5, pp. 534-541
Capafons, Antonio y Mazzoni, Giuliana. (2004) ¿Es lo peligroso de la hipnosis el hipnoterapeuta?: hipnosis y falsos recuerdos. Papeles del Psicólogo. Vol. 25(89).
Gracia, E., & Martinez, I. M. (2004). El control de emociones en el trabajo: una revisión teórica del trabajo emocional.
Vargas V., Walter (2005) Consideraciones psicológicas sobre la hipnosis aplicada al manejo del dolor Enfermería Actual en Costa Rica, vol. 4, núm. 8.