¿Alguna vez te has preguntado cuál es el tiempo ideal de una relación sexual? Muchos lo han hecho y es que “la duración” es un tema tabú cuando de evaluar el desempeño masculino se trata. Por ello, la ciencia ha buscado darle una respuesta. ¿Cuánto debe durar una relación sexual? En Phrònesis te lo contamos.
Según un estudio realizado por el psicólogo Brendan Zietsch, el coito tiene duración promedio de 5,4 min. Los resultados corresponden a una muestra de 500 parejas originarias de distintos países, de edades entre los 18 y 60 años y en una relación de pareja estable.
El estudio medía el tiempo desde que el pene se introducía a la vagina hasta el momento en el que se producía la eyaculación.
El método utilizado se resume en que cada pareja presionaba un botón de “inicio” al comienzo de la copulación y “final” al momento de la salida de la esperma.
Las conclusiones establecen un descenso en la media del tiempo según la edad: 6,5 min para los caballeros entre 18 y 30 años, mientras que los mayores de 51 años alcanzaron un tiempo de 3,4 min. Aparentemente, hay diferencias poco significativas con respecto a la ubicación geográfica. No obstante, Turquía fue la excepción con un promedio de 3,4 min.
Resultó ilustrativo e interesante que las conclusiones desmitifican de una vez por todas que el uso del condón sea retardante del proceso de eyaculación.
Otro estudio realizado por la Universidad de Pensilvania, habla de relaciones demasiado cortas -entre 1 y 2 min-, versus demasiado largas -mayores a 13 min-. Sus conclusiones describen que el sexo “adecuado” y “deseado” debe durar entre 7 y 13 min.
The Journal Sex Medicine se pronuncia el respecto explicando que un encuentro demasiado corto crea insatisfacción, mientras que uno demasiado largo genera agotamiento físico, dolor, irritación genital y reducción del placer.
¡Reducir una relación sexual al momento de la eyaculación nos convierte en primitivos!
Actualmente, concebimos los encuentros íntimos precedidos por rituales amorosos que van desde besos y caricias hasta el uso de material audiovisual, fantasías y juguetes eróticos. Cada oveja con su pareja, es decir, cada pareja decide cómo satisfacerse.
La brevedad del placer orgásmico corresponde a una estrategia del área cerebral llamada Corteza Orbitofrontal (COF) en donde cohabitan neuronas que actúan como sensores del placer, regulando la sensación de placer cuando ha sido demasiado larga hasta detenerla y generar lo que llamamos comúnmente ¡hastío!
¿Por qué existe un límite de tiempo para el placer?
Es un mecanismo de preservación de la especie. El cerebro tiene un sistema que protege los circuitos cerebrales que garantizan el goce. De esta manera, el hombre y la mujer copulan para sentir placer, mientras que, biológicamente, lo hacemos para darle continuidad a la manada.
Por otro lado, en una relación sexual el clímax se produce, entre otras cosas, por movimientos repetitivos de penetración. Esa coreografía la ejecuta el macho para cerciorarse de que la zona en donde caerán sus semillas sea apta para recibirlas.
En otras palabras menos poéticas, con esos pequeños golpes que el pene realiza dentro de la vagina se procura limpiar los restos de secreciones anteriores para asegurarse de que sus espermatozoides sean quienes fecunden a la hembra.
¿Por qué tanto revuelo con la duración del acto sexual?
La mayoría de estos estudios han sido liderados por el género masculino, entre otras cosas, para darle un respaldo científico a lo que coloquialmente conocemos como expectativa versus realidad. Sabemos que el espíritu competitivo que rodea el ambiente sexual va desde el tamaño hasta las largas horas de rendimiento del órgano en cuestión.
Por lo pronto, podemos rescatar que el buen sexo no está condicionado a un cronometro y como en casi todo, es necesario un balance entre un encuentro “muy corto o muy largo”.
Así como en la comunicación el uso de los tiempos verbales ayuda a expresar mejor las ideas… Los tiempos sexuales nos dan una idea de cómo manejar mejor esas preguntas que, a veces, se nos quedan pegadas en las sábanas.