¿Has escuchado hablar del efecto Matilda? La historiadora Margaret Rossiter introdujo este concepto en su obra Women Scientists in America, para referirse al sesgo que lleva a las personas a desestimar los aportes de las mujeres en la ciencia, atribuyendo el logro a los hombres.
Hay innumerables casos de mujeres que, en su época, no obtuvieron el reconocimiento que se merecían solo por su género. La buena noticia es que los tiempos han cambiado y hoy se puede hablar abiertamente de la capacidad de las mujeres, su inteligencia y potencial como gestoras de cambio más allá del ámbito familiar. Por eso, en esta oportunidad destacamos a tres científicas cuyos aportes fueron ignorados o subestimados en su momento, pero que han sido muy importantes para los avances científicos de la modernidad.
1. Dorothy Andersen

Dorothy Hansine Andersen fue la primera médica en identificar la fibrosis quística como enfermedad.
Después de obtener su título médico en la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins, en 1926, Andersen completó una pasantía quirúrgica en el Strong Memorial Hospital en Rochester (Nueva York). En Strong, le negaron una residencia quirúrgica porque era mujer, y terminó uniéndose al departamento de patología del Colegio de Médicos y Cirujanos de la Universidad de Columbia.
En 1958, fue nombrada jefa de patología en el Hospital Presbiteriano de Columbia y profesora titular de patología en la Universidad de Columbia. Sus responsabilidades incluían realizar autopsias, fue así como notó una lesión en el páncreas de un niño que, presuntamente, había fallecido por la enfermedad celíaca. Después de buscar en los registros de la autopsia y la literatura médica, descubrió un patrón de enfermedad desconocida hasta el momento, que llamó fibrosis quística.
Junto con su equipo de investigación, Anderson creó la primera prueba diagnóstica para la fibrosis quística, que todavía se usa en la actualidad.
2. Alice Ball

Alice Augusta Ball fue una química afroamericana que desarrolló un extracto de aceite inyectable para tratar la lepra, a base de las semillas de árbol de chaulmoogra. Este tratamiento ya se utilizaba en la época, pero no era lo bastante efectivo hasta que Ball descubrió una mejor técnica durante su trabajo como asistente de laboratorio en la Universidad de Hawái.
El método de Ball fue el más efectivo para la lepra hasta la década de 1940, sin embargo, no recibió ningún crédito por sus aportes. Primero, debido a que falleció a una edad temprana, con solo 24 años. Sumado a esto, el químico y presidente de la Universidad de Hawái, Arthur L. Dean, se adueñó de su trabajo, publicando los hallazgos como si fueran suyos y cambiando el nombre de la técnica por “Método Dean”.
Aunque el Dr. Harry T. Hollmann, que había sido el supervisor de Ball, dijo lo que Dean había hecho, la universidad ignoró por completo el trabajo de Ball durante casi 90 años. Finalmente, en 2000 se le dio reconocimiento con una placa conmemorativa en un árbol de chaulmoogra y se declaró el 29 de febrero como Día de Alice Ball.
3. Eunice Foote

Eunice Foote fue una científica que, en la década de 1850, realizó experimentos sobre la influencia de los gases atmosféricos en la temperatura o, como lo llamó en su momento, “el calor de los rayos del sol”. Aunque no contaba con los recursos tecnológicos que existen hoy en día, Foote se las ingenió usando cilindros de vidrio y termómetros de mercurio. Así descubrió que el calor del sol era mayor en un cilindro que contenía dióxido de carbono.
Estos hallazgos demostraron la capacidad del vapor de agua atmosférico y el dióxido de carbono para afectar el calentamiento solar, un descubrimiento que precedió los estudios de John Tyndall sobre el efecto invernadero. Por desgracia, los experimentos de Foote pasaron desapercibidos hasta el siglo XXI, cuando se reconoció su rol pionero en la ciencia climática.
📰 Puedes seguir leyendo: 3 mujeres que cambiaron el rumbo de la ciencia
Referencias:
Dr. Dorothy Hansen Andersen – Changing the Face of Science.
Disponible en: https://cfmedicine.nlm.nih.gov/physicians/biography_8.html
Grace Murray Hopper (1906-1992): A legacy of innovation and service. (2017).
Disponible en: https://news.yale.edu/2017/02/10/grace-murray-hopper-1906-1992-legacy-innovation-and-service
Alice Ball – History of Scientific Women. (s.f.).
Disponible en: https://scientificwomen.net/women/ball-alice-121
Happy 200th birthday to Eunice Foote, hidden climate science pioneer. (2021).
Disponible en: https://www.climate.gov/news-features/features/happy-200th-birthday-eunice-foote-hidden-climate-science-pioneer
Women Scientists Were Written Out of History. It’s Margaret Rossiter’s Lifelong Mission to Fix That. (2019).
Disponible en: https://www.smithsonianmag.com/science-nature/unheralded-women-scientists-finally-getting-their-due-180973082/